martes, 25 de julio de 2023

Te abrazo, Soledad

 Llegué en plena luna nueva, 

ya hace cuatro décadas y un poco,

unas quinientas y cinco lunas llenas

desde que abrí mis ojos a este mundo.

He querido a muchas personas,

he besado a otra cantidad,

más en el camino me encuentro de nuevo

sólo en el concierto nocturno del terruño.

Lugar que me vió crecer,

tener sueños y pesadillas.

Hacer amigos, y verlos partir.

Podría decir que he deambulado,

más el viento cósmico en mi destino

me ha colocado.

Sólo en mi mundo, con mis sueños,

mis planes y anhelos. En la noche,

la luna se vuelve a asomar sin fallo.

Espero una señal trascendental que no llega,

que se escucha quizás a la distancia,

pero que su tono amaina con el sonido del viento.

Se siente bien después de un tiempo,

se acostumbra el cuerpo

y la mente, que quieren algo o alguien,

más sigo con un sólo par de huellas en la arena.

Treinta y cinco veces me dijo una vez una amiga,

ya has superado ésa etapa.

Me hace falta disfrutar a mí mismo.

Con mis faltas y defectos,

rasgos que la vida misma me ha forjado.

Una frase repito y repito:

És más divertido en compañía.


Alas Quebradas - sin fecha - Genaro Rafael Ulate Villalobos

No volverás a mí... yo lo presiento

todo tiene su fin... pasando el tiempo

tú podrás reír de mi tormento

y no serás feliz

aunque te encuentres otro amor.


Yo seguiré luchando, con mi penas

hasta arrancar de mi alma, esta cadena

esa pasión que arrastro y me condena

a la prisión oscura de mis noches de dolor.


Tu puedes ir sin mí por todas partes,

gaviota de aristocrático plumaje

yo podré mirar a la distancia, azul

tus alas ya quebradas, sobre el mar.


No volverás a mí, con la mentira

por la que yo sentí, perder la vida

hay tormentas negras en el alma,

donde muere el amor cuando le falta la verdad.


Tú puedes ir sin mí por todas parte

gaviota de aristocrático plumaje

yo podré mirar en la distancia, azul

tus alas ya quebradas sobre el mar.

Vuelo Supremo - sin fecha - Genaro Rafael Ulate Villalobos

 Quiero vivir la vida aventurera

de los errantes pájaros marinos

no tener, para ir a otra ribera

la prosaica visión de los caminos.


Poder volar cuando la tarde muera

entre fugaces lampos ambarinos

y poner a los raudos torbellinos

el ala fuerte y la mirada fiera.


Huir de todo lo que sea humano;

embriagarme de azul... Ser soberano

de dos inmensidades: mar y cielo,


y cuando sienta el corazón cansado,

morir en un peñón abandonado

con las alas abiertas al vuelo.

Jinetes en el Cielo - sin fecha - Genaro Rafael Ulate Villalobos

     En una noche oscura de terrible tempestad

cruzando por el valle iba un vaquero en su corcel,

de pronto vió en el cielo con radiante claridad

rebaños de mil vacas fantasmas en tropel.


Arree, arree, en lúgubre clamor...


    Los ojos de esas bestias eran brasas al mirar, 

los cascos de sus patas centelleaban al pisar,

sus trágicos bramidos tenían algo de infernal,

sus cuernos lucían negros con brillo de metal.


Arree, arree, en lúgubre clamor...


    Detrás de la manada cabalgando sin cesar,

jinetes en el cielo la trataban de alcanzar,

entonces el vaquero solitario oyó una voz,

la voz de la conciencia como una maldición.


Arree, arree, en lúgubre clamor...


    Si quieres salvar tu alma y saber lo que es la paz

tu debes apartarte por tu bien de la maldad

sino tendrás por fuerza que seguir siempre detrás

arreando este rebaño, toda una eternidad.


Arree, arree, en lúgubre clamor...